Más vale tarde que nunca. Mi diario de embarazo llega seis meses tarde. ¡Muy fuerte, lo sé! ¿Qué le vamos a hacer? Entre unas cosas y otras... ya se sabe. Mil disculpas.
Voy a ser madre primeriza, una ilusión que tenía que venir un pelín más tarde, pero vamos, ¡y tan bienvenido! ¿Impresiones? Bueno, al principio me pilló en un momento de mucho movimiento en mi vida, así que no lo empecé a disfrutar hasta los tres o cuatro meses. Y ahora que llevo seis y hace más de uno que ya le noto, ¡me muero de ganas por verle la carita! La verdad es que hasta que no se mueve no eres realmente consciente que tienes algo en tu interior (bueno sí, porque vas haciendo tripita). Es una sensación "que da cosa" al principio pero luego deseas que no pare, aunque a veces te hagar pegar algún bote. Es muy gracioso.
Por lo demás, tengo la suerte de estar llevando un día a día relajado pero con movimiento: trabajo desde casa, voy al gimnasio y voy comiendo bien (aunque pico lo que no tengo que picar... pero voy bien de peso :P): puedo comer de todo, no tengo diabetis gestacional, el niño está estupendo. ¿Qué más puedo pedir? Suerte que una tiene nueves meses para interiorizar lo que viene encima.
MSM
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